Las orejuelas son una receta típica de la festividad del Carnaval. Aunque hay muchas personas que las compran en tiendas, no son difíciles de cocinar en casa. Este postre consiste en una masa de harina y huevo mezclada con algún licor, ya sea anís o orujo. A pesar de tener alcohol, se trata de una comida perfectamente apta para los más pequeños. Al freírlas en una sartén, el alcohol que contiene el licor se evapora. A continuación te contamos cómo hacer unas orejuelas de Carnaval para chuparse los dedos.
Para esta receta necesitaremos:
- 350 g de harina de trigo de uso común Spar
- 2 huevos
- 3 cucharadas de aceite de oliva virgen Spar
- 6 cucharadas de azúcar blanco Spar
- 100 ml de anís
En primer lugar, prepararemos la masa. Para ello, pondremos en un bol todos los ingredientes, excepto la harina. Después añadiremos lentamente 250 g de harina y lo mezclaremos todo. La idea es conseguir una textura que no quede demasiado seca.
A continuación, mezclaremos todos los ingredientes y sacaremos la masa del bol. Luego amasaremos entre 5 y 10 minutos. Después meteremos de nuevo la masa en el bol y la dejaremos reposar tapada durante mínimo 30 minutos.
Cuando la masa haya reposado, cogeremos una porción de las orejuelas y echaremos un pequeño puñado de harina sobre la encimera. Entonces colocaremos encima la masa y la estiraremos con la ayuda de un rodillo. En cuanto veamos que tenemos una textura fina con dos milímetros de grosor, la cortaremos en forma de cuadrados.
En este punto pondremos aceite abundante en una sartén a fuego fuerte y las freiremos en tandas pequeñas. Al cabo de un minuto, las colocaremos sobre papel absorbente. Una vez hayamos terminado de freír toda la masa, pondremos un puñado de azúcar sobre una bandeja y dejaremos las orejuelas encima. Después añadiremos más azúcar encima de estas y, ¡listo! Ya tendremos hecho un postre de Carnaval que no dejará a nadie indiferente.