La primavera la sangre altera y también el ritmo y afectaciones de nuestro cuerpo. ¡Empiezan a brotar las flores y el polen está en el aire! Millones de diminutos pólenes que desencadenan síntomas de alergia en millones de personas. Esta afectación se llama “rinitis alérgica estacional”, afección que en algunas personas solo dura en temporada de primavera pero que para otras se puede alargar.
Este tipo de alergia cada vez afecta a más personas y en especial a los niños. Por eso, debemos tener cuidado y saber distinguir los síntomas para ponerle remedio lo antes posible.
Nuestro cuerpo responde a los estímulos y puede generar rinitis alérgica provocando así estornudos, congestión nasal, picazón en nariz, paladar, ojos y oídos. En algunos casos también puede provocar dificultades respiratorias, eccemas y episodios de asma.
¿Cómo podemos prevenir o reducir sus síntomas? Las personas que saben que son alérgicas al polen deben ser más previsoras e ir a la consulta de su alergólogo antes de que empiece la primavera y adoptar rutinas preventivas para reducir la inhalación de polen. Aquí os dejamos unas recomendaciones para hacer frente a las alergias producidas por el polen:
- En la medida de lo posible, evitaremos salir a la calle en las horas de más polinización: al amanecer y atardecer. Además, siempre es preferible evitar los parques y jardines y tener cuidado con los días de mucho viento ya que remueve el polen.
- Es aconsejable mantener las ventanas de nuestro hogar cerradas para evitar la entrada de polen especialmente si hace viento. Para ventilar la casa lo podemos hacer al mediodía, cuando la concentración de polen es menor ¡con diez minutos será suficiente!
- Tener siempre a mano los medicamentos recetados por el alergólogo para hacer frente a los síntomas ¡Recordad seguir siempre las indicaciones!
- Si utilizamos el coche, debemos mantener las ventanillas cerradas para evitar la entrada de polen y si es posible poner un filtro en el aire acondicionado.
- ¡Cuidado con la ropa! Después del lavado debemos tener cuidado y tenderla en el interior de la casa para evitar que el polen se acumule sobre ella.
- La práctica de ejercicio es recomendable realizarla en espacios cerrados y evitar los espacios con mucha vegetación como parques, jardines o el campo.
- En los días con mayor concentración de polen y sobre todo si hemos estado expuestos, es recomendable darse una ducha al llegar a casa y cambiarse de ropa. Así eliminaremos todo el polen que se haya podido acumular sobre el pelo, la piel y la ropa.
¡Y con todo esto intentaremos pasar por este periodo de la mejor manera posible! Con alergia o sin ella la primavera es una fantástica estación para disfrutar de la llegada del buen tiempo.